La vieja energía nos ha edificado dentro de un mundo en el que damos por sentado que hacer suposiciones entra dentro de lo que es correcto, e inclusive en muchas ocasiones tenemos plena certeza de que aquello que suponemos es lo certero, y eso lo único que hace es acrecentar el ego. 

Está claro que somos volubles, que nos agobiamos infinidad de veces, que la contrariedad nos saca de quicio, y que muchas veces sobre todo cuando no tenemos plena seguridad, suponemos. Suponer siempre puede generar error, muchas veces tenemos la suficiente información para suponer, sí, aunque normalmente nuestra mente crea entorno a la suposición y genera ilusiones positivas o negativas elaborando un entorno concreto; (vamos, que nos montamos nuestra propia película de las cosas) trama que muchas veces es ilusoria no dejándonos ver la realidad, y otras puede llegar a ser obsesiva generando un cuerpo del dolor muy acusado, y éste, llega a transformar la personalidad y carácter de una persona. 

Si dejamos que una figuración tome el protagonismo y que se coloque en el primer plano de una situación, se pueden tomar decisiones erróneas de las que podemos llegar a arrepentirnos. Suponer puede terminar con cualquier relación ya sea amistosa o sentimental, las suposiciones condicionan nuestra percepción 

Tú puedes suponer lo que quieras, pero te digo algo, si tienes por costumbre hacer suposiciones, montándote historias, estarás viviendo un constante irrealismo. No se pueden hacer suposiciones porque la vida cambia a cada instante. Desiste de esa vieja energía y no dejes que tu mente recree figuraciones que te desvíen de la realidad. 

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