miércoles, septiembre 11, 2013 |
Algunas personas sufren de Crisis de Ansiedad de una forma espontánea, como si no hubiera ningún desencadenante. Esto ocurre en aquellas personas que padecen trastorno de pánico.
De repente, sin saber por qué, comienza la crisis de ansiedad y alcanza el máximo de miedo en cuestión de segundos, generalmente dos o tres minutos.
Segun el tipo de situación que genera el miedo irracional y desproporcionado, se hace presente la agrofobia, fobia social u otras fobias específicas.
Por lo tanto, una crisis de ansiedad es una reacción de miedo o malestar intenso que se presenta de una forma repentina.
Los síntomas son los siguientes: Palpitaciones, sudoración, temblores, sensación de ahogo, opresión en el pecho, naúseas o molestias abdominales, inestabilidad o mareo, miedo a perder el control, miedo a morir, escalofríos...
Una relajación muscular profunda es lo más adecuado. Por eso, Reiki, es una técnica muy apropiada para tratar las crisis de ansiedad, porque busca el punto intermedio entre los extremos físicos, emocionales y mentales, cuando hay un exceso de nergía o falta de la misma.
Usando nuestras manos, de una forma simple, se puede conseguir el equilibrio deseado. Si pones tus manos en la boca del estómago durante unos 10 minutos y después por debajo del ombligo otros 10 minutos, lograrás la seguridad y el dominio que deseas.
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Salud y vida
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3 Dejaron huellas de su paso...:
Muy interesante es el tema del pánico ya que hoy en día hay tanta gente que lo padece. Yo acostumbro poner las manos en forma de v sobre mi vientre cuando estoy acostada, si me duele algo o no me siento bien, enseguida me alivia. También imagino que la luz de Dios me penetra y es aún mejor. Los felicito por el blog Y por el post. BESOS.
He probado con reiki, flores de bach, acupuntura y aunque al comienzo me genera un efecto placebo después vuelvo con la misma ansiedad. Lo mío debe ser fisiológico.
donbrocoli.blogspot.com
Hola Siry, excelente post, creo que a veces tenemos esas etapas de ansiedad, aunque no tan intensas y frecuentes, no deja de hacer efecto en nuestra salud. Gracias por esos buenos consejos... los refuerzo con mis oraciones. Besos, Dios te bendiga.